El Carnaval está a la vuelta de la esquina y Zaragoza se prepara como todos los años para esta gran festividad cargada de alegría, jolgorio y buen ambiente.
El Carnaval es una celebración que hace que todos los menudos, menudas y no tan menudos guarden la tristeza en el cajón dejando cabida solo para la alegría. En estos días la felicidad es el aroma que reina por las calles de Zaragoza, miles de personas se visten como más les gustan, una fecha que permite el poder convertirse en superhéroes o superheroínas, en príncipes o princesas o incluso en villanos y villanas, la magia del carnaval recorre todas las calles.
Muchos disfraces y cientos de risas pero los que nunca pasarán desapercibidos son el alma de estas fiestas aragonesas, ¿Sabéis de quién os hablamos?
El Conde Salchichón, Doña Cuaresma, Don Carnal, el Caballero de la Hornilla, el Rey Gallos y La Mojiganga, unos personajes que a pesar de su gracia y su pintoresca no dejan de pertenecer a la realeza. Estos cinco personajes son un mito en el Carnaval.
Por las orillas del Ebro aparece el Conde de Salchichón, un hombre delgado y alegre con una sencilla misión, proclamar la llegada del Carnaval como mensajero de Don Carnal. Este pintoresco personaje llena de risas toda la ciudad.
Doña Cuaresma y Don Carnal no pueden odiarse más, siempre de la mano él representa todo lo mundano, la alegría y el disfrute es un señor bien alimentado. Con la carne de su mano desafía a su señora contra el pescado. Con su cara de tristeza, Doña Cuaresma es símbolo de abstinencia, su miedo al pecado hace que odie a todo al que tiene a su lado.
La Mojiganga, no es un solo personaje, una comparsa que con sus cantos unen la crítica y la burla propagándola por toda la ciudad el grupo canta un año más que se acerca el comienzo del Carnaval.
Unas figuras que hacen del carnaval una fiesta única, ¡no os perdáis su llegada!.
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