El próximo viernes, 30 de octubre, a las 20:30 h, dentro de la programación de Teatro Arbolé, se representará la obra “Ser o no ser” de la Compañía el Gato Negrointerpretada por Alberto Castrillo-Ferrer.
“Ser o no ser” es un espectáculo que se introduce de lleno en el misterio del teatro, de la dualidad actor-personaje pero sobre todo indaga en la búsqueda y aceptación de uno mismo tal y como es, no como la sociedad y las modas quieren que sea.
Lleno de humor, a veces inocente y otras algo más cáustico, “Ser o no ser” es un grito por la creación sincera y personal, por la existencia, por la amistad y por el respeto a los demás y a si mismo.
Raúl es un actor que decide realizar el sueño de su vida: reunir los mejores monólogos de Shakespeare en un sólo espectáculo (Hamlet, Macbeth, Othelo, Rey Lear…) y servirlos al público sin ningún argumento particular, como una muestra de talento y virtuosismo personal. Para ello cuenta con el director más “moderno” del momento y con unas ideas que, como veremos, resultarán bastante desafortunadas. En mitad del duro proceso, Raúl “encuentra” por fin a su propio personaje, pero éste resulta ser distinto de lo que él esperaba. No le gusta. El personaje que él mismo ha creado es demasiado popular, demasiado cómico… y no tan serio y pretencioso como los demás le dicen que debería ser. ¿Y si el personaje se pudiera rebelar contra el actor que lo interpreta?.
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“Ser o no ser” es un espectáculo que se introduce de lleno en el misterio del teatro, de la dualidad actor-personaje pero sobre todo indaga en la búsqueda y aceptación de uno mismo tal y como es, no como la sociedad y las modas quieren que sea.
Lleno de humor, a veces inocente y otras algo más cáustico, “Ser o no ser” es un grito por la creación sincera y personal, por la existencia, por la amistad y por el respeto a los demás y a si mismo.
Raúl es un actor que decide realizar el sueño de su vida: reunir los mejores monólogos de Shakespeare en un sólo espectáculo (Hamlet, Macbeth, Othelo, Rey Lear…) y servirlos al público sin ningún argumento particular, como una muestra de talento y virtuosismo personal. Para ello cuenta con el director más “moderno” del momento y con unas ideas que, como veremos, resultarán bastante desafortunadas. En mitad del duro proceso, Raúl “encuentra” por fin a su propio personaje, pero éste resulta ser distinto de lo que él esperaba. No le gusta. El personaje que él mismo ha creado es demasiado popular, demasiado cómico… y no tan serio y pretencioso como los demás le dicen que debería ser. ¿Y si el personaje se pudiera rebelar contra el actor que lo interpreta?.
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Más info en www.teatroarbole.es